Induce vivencias que tienen un efecto regulador, restablece el equilibrio psicofísico reduciendo el estrés y las tensiones orgánicas y musculares, fortalece el sistema inmunológico.
A nivel existencial
Ayuda a elevar la calidad de vida, a través del cambio profundo y duradero de las actitudes internas, dado que su práctica continuada produce el sentimiento global de bienestar en todos los ámbitos de la vida.
Mejora la relación con uno mismo y con los demás.
Desarrolla los potenciales genéticos: vitalidad, afectividad, creatividad, sexualidad y trascendencia.
A nivel corporal
Optimiza la relación con lo corporal dando fluidez, flexibilidad, potencia, coordinación y ritmo lo cual estimula la vitalidad, repercutiendo directamente en la salud física.
Disuelve progresivamente las tensiones: estrés y dolores en general.
A nivel filosófico y poético
Fomenta la conexión con la sensibilidad y la poética del encuentro humano.
Nos hacen sentir el modo en que se expresa lo esencial.
Contribuye al desarrollo de sentimientos de unidad con todo lo que nos rodea y de conexión con el Universo.
Conecta con la poética de la palabra y del movimiento.
A nivel psicológico
Produce efectos de armonía aumentando el equilibrio psicológico.
Integra lo que pensamos, sentimos y hacemos en el aquí y ahora.
Ayuda a superar estados de tensión.
Disminuye el exceso de actividad mental, favoreciendo entrar en el plano del sentir.
Facilita la expresión de las emociones.
Favorece la conexión con la Vida en toda su plenitud.
Ayuda al reencuentro consigo mismo y con los demás.
Fortalece la salud emocional y mental.
Restaura el equilibrio emocional.
Permite conectar con el goce y el placer provocando un efecto regenerador en todo el organismo y en la conciencia.